Una estudiante de opera descubre una vieja composicion de un autor maldito. Sobre un escenario y durante una prueba de audicion interpreta la cancion con singular exito, pero un misterioso accidente la transporta al pasado donde conoce al compositor : El fantasma de la Opera.
Aqui Robert Englund hace el papel del célebre fantasma, pero esta versión pertenece al estilo de cintas de horror gore realizados durante la decada de los 80´s, ya que se ve como se dedica a quitarles la piel a sus victimas para con ellas cubrir la deformacion de su rostro, producto de una maldicion, en este apartado destaca el maquillaje de Kevin Yagher. El argumento sobre el asunto amoroso por la cantante Cristine Day, una joven y novata interprete con quien piensa unirse para siempre, mientras la ayuda para alcanzar el exito, es lo que esencialmente se mantiene respecto del relato clásico. Creo que toda la pelicula resulta correcta pero sin mucho brillo, el inicio si es bastante curioso con esa puesta en escena sobre el escenario teatral y la alucinacion que sufre la intérprete, pero los siguientes tres cuartos de cinta se desarrollan sin mayor novedad, quiza algo de interes en un momento en el cementerio, pero nada de mucho interes, hasta llegar al final donde la falta de ideas si llega a ser alarmante. En sus actuaciones destaca Robert Englund en el papel principal, bien realizado, aunque no deja de dar la sensacion de ver a Freddy Krueger bien vestido. La atormentada cantante es caracterizada por la actriz Jill Schoelen, un bello rostro adecuado para el papel. La puesta en escena esta lograda corectamente, con ese Londres del siglo XIX sombrio y tenebroso, pero con salones y teatros muy elegantes y refinados. En general resulta regularmente entretenida, al menos me gustó mas que la version que hizo Dario Argento, donde el horror gore y el fantasma no despertaban ningun interes.
Dirige Dwight H. Little.
Reparto : Robert Englund, Jill Schoelen, Alex Hyde-White, Bill Nighy, Stephanie Lawrence y otros.
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