Su vestido también estaba firmado por Alexander McQueen, concretamente es una reinterpretación de un diseño de la colección prefall 2009.
La silueta del vestido de McQueen al completo, ceñido pero ligeramente acampanada en el bajo.
Si hubiera un ranking de popularidad en la boda real inglesa, sin lugar a dudas el primer puesto sería para la novia. Una obviedad. Pero lo interesante es averiguar qué otras mujeres han acaparado la atención de las cámaras en un día tan señalado. Y este 29 de abril hay una clara ganadora: Pippa Middleton, la hermanísima de la novia, que ha conquistado a todos con su frescura y su belleza.
Su vestido, de la colección prefall 2009 de Alexander McQueen, era tan sencillo como favorecedor. De color blanco, algo poco protocolario, con una silueta limpia y proporcionada, la única licencia que se permite el diseño es el escote, doble y desbocado el primero y rematado –junto con las mangas- con una ligerísima puntilla.
Pippa Middleton -en la imagen de espaldas- ha sido una de las protagonistas de la boda real. Con permiso de su hermana, claro.
Pippa ha sido la única dama de honor de Kate Middleton, ayudándola con la cola en todo momento.
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Pippa abandona la abadía de Westminster en una carroza. En esta imagen se aprecia con detalle su peinado, un semirrecogido rematado con flores naturales. Los pendientes de diamantes, al igual que los de Kate, son de Robinson Pelham
Otro plano de la hermana de Kate Middleton.
Pippa se ha saltado el protocolo al ir de blanco y de largo a la boda. Su estatus de dama de honor se lo permitía.
Pippa, atenta con la cola del vestido de la novia, escolta a los novios, ya convertidos en marido y mujer.
Con este vestido verde esmeralda asistió Pippa Middleton a la cena ofrecida por el príncipe Carlos.
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